Eterno Retorno

Saturday, May 21, 2005

Jueves de trabajo en Ensenada. Antes de las 6:00 estábamos al píe del cañón. El Riviera transformado en fortaleza, por obra y gracia del estado mayor. Repetitivas palabras presidenciales, machote cuatro, ordinaria sinfonía. Precioso día. Este mayo casi se quiere creer verano. Lástima que no hubo tiempo de escapar al Husongs. La Cenicienta es un asunto de placer y el día estaba precioso. Lo mejor, como siempre, la carretera.


Este año he traído buen ojo para los libros. Al menos los últimos tres que han caído en mis manos, si andan aspirando a ser inolvidables. El Leviatán de Auster, Rey de La Habana de Pedro Juan y la Lotería de Uribe me han dejado excelente saborcito de boca.