Eterno Retorno

Wednesday, April 30, 2003


Noticias headbangueras

Un festival de auténtico y verdadero metal europeo está pateando culos en Norteamérica. Se trata del Metal Gods Tour, algo así como un Ozz Fest pero de metal en su estado más puro.
Ante él, Ozz Fest y su basura nü metal alternativa se queda muy pequeño.
El Metal Gods tour lo encabeza un personaje que al igual que Ozzy Osbourne es natural de Birmingham pero que en vez de prostituirse como un mal bufón de la pantalla, se ha dedicado a cultivar el buen metal alrededor del mundo. Se trata de Rob Halford, el emblemático metal god, puro acero británico que desde su lamentable salida de Judas Priest sigue gritando por venganza.
El Metal Gods presenta una alineación más que apetitosa. Un par de deathmetaleros suecos de primer nivel como son Carnal Forge y Amon Amarth se darán cita en el escenario. Los legendarios blackmetaleros noruegos de Immortal, sobrevivientes del célebre círculo negro que se dedicó a quemar iglesias en todo Noruega, serán los terceros del cartel. Immortal es un black metal ortodoxo que vale la pena apreciar. Los segundos del cartel serán los célebres thrasheros de Testament, sobrevivientes de aquella headbanguera generación de la bay area que practica lo que predica. La herencia thrasher tatuada en el Testamento.
Cierra obviamente Rob Halford con su más que aceptable nuevo material de Crucible y Resurection y una buena dosis, me imagino yo, de temas de Priest.
Pero al último dejo a una bada que por si sola hace valer todo el festival: Los alemanes de Primal Fear, un demoledor heavy que recuerda los mejores años de Priest. Yo viajaría muchos kilómetros con tal de escuchar en vivo una rola como Angel in black. Pero he aquí que los heraldos de lo infausto me persiguen cual personaje de tragedia griega. Primal Fear solo cubrirá la mitad del tour y se marchará a proseguir sus compromisos europeos entre los que está el Blind Guardian Festival en Alemania. Esto significa que en el show de Los Ángeles el 6 de junio no estarán. La ausencia del miedo primario y el hecho de que en esas fechas me estaré cambiando de casa y estaré muy gastado, hacen factible mi ausencia de tan esperado evento. La tragedia me persigue-


Por si algún buen samaritano se apiada de un hombre que debe destinar a su nueva casa los recursos que antes destinaba a la industria discográfica, estos son los títulos que hoy en día mueven el tapete de mis deseos.

El disco Echoes de los alemanes de Lacrimosa es un trabajo del mejor estilo gótico atmosférico que por estos rumbos no he podido conseguir. En verdad creo que vale la pena.

El disco Damage Done de los suecos Dark Tranquility es un manjar de death metal melódico. Puro sonido Gotenburgo. Estos escandinavos tocaron en Monterrey la noche del 10 de enero. Como hubiera deseado estar ahí.

El Crucible o el Live Insurrection de Halford son excelentes piezas que cuando los tenga harán pedazos los tímpanos de mis nuevos vecinos en Hacienda del Mar. La voz del auténtico Metal God parece ser como los buenos vinos.

Los finlandeses Sinergy son una banda tan fría como brutal. Últimamente los grupos death metal apuestan por mujeres en la voz que cantan aún más agresivamente que los hombres. El disco Suicide by my side es una excelente prueba de ello.


La orgía de los posers

El reportero de la Crónica que reseñó el festival Coachella se atrevió a decir que fue un manjar para todos aquellos que gozan de la música pesada en sus más diversas acepciones. ¿Música pesada? ¿Pues a donde chingados fue? Fuera de Sonic Youth e Iggy Pop por los cuales siento cierto respeto, todo el cartel era una absoluta mierda propia de un gringuito puñetero al que Sams Goddy es capaz de orgasmearlo. En que poca mierda se ahogan esos que se autodefinen como alternativos.